El segundo día del Simposio Internacional de Misiones que se está llevando a cabo en Montreal, Canadá contó con la participación del padre William Segura, Encargado Nacional de Nueva Evangelización de Costa Rica y miembro del Equipo Reflexión Bíblica del CAM6. El sacerdote dirigió su ponencia entorno al tema: Proclamar con la fuerza del Espíritu, desde los hechos de Apóstoles, en la destacó la necesidad de proclamar la palabra de Dios desde el corazón y con todas nuestras fuerzas, mostrando que existe una nueva forma de vivir y existir. El presbítero señaló que “la vida del misionero ha de estar acompañado de la oración y la contemplación, de manera que el misionero pueda hablar de las grandezas de Dios, pues él mismo es testigo, aún cuando eso implique el martirio».
Posterior a la participación del padre Segura, los participantes del Simposio atentos escucharon el testimonio de un misionero Oblato de María Inmaculada, quien es africano y trabaja en la misión indígena en la provincia de Quebec. Para el misionero, la clave de la misión está en la “escucha” del pueblo, su realidad, su cultura, de manera que podamos reflexionar que la Iglesia se extiende más allá de los edificios, y que se consolida en la vivencia, a lo interno de la comunidad asumiendo la historia no sólo positiva de la evangelización, sino asumiendo a su vez el lado oscuro de ella, y buscando la reconciliación para dejarse tocar por el dedo de Dios.
Según expresó el Pbro. Jorge Sancho, director diocesano de OMP y Vicario Episcopal de Misiones Diócesis de San Isidro: “El segundo día de Simposio que comenzó con un continente que da gracias a Dios terminó con un continente de rodillas, adorándole y contemplando las maravillas que nos ha permitido descubrir en la interculturalidad para el servicio misionero, de un continente que se redescubre misionero para el mundo” indicó.