Poco antes del medio día de este martes 27 de junio, un equipo de Radio Sinaí 103.9 FM, integrado por Jordan Loaiza, Diany Monge, Laura Ceciliano y el Pbro. Elí Quirós, partieron con la misión de llevar un poco de alegría a una de las fieles oyentes de nuestra emisora; fue así, como nos dirigimos hacia Calle Cabrera en Quebrada Honda de Pérez Zeledón.
Después de consultar a algunos vecinos, por fin llegamos a nuestro feliz destino, y entre una propiedad muy marcada por el verde de las plantas nos atendió una delgada mujer, que con su gran sonrisa nos dijo que María Irene Fallas Chinchilla vivía atrás de su casa y que podíamos pasar hasta allá…
Pronto nos enterábamos que aquella era su misma madre, Flor Chinchilla Borbón caminaba junto al vehículo que debidamente rotulado le hacía comprender a esta mujer que se trataba sin duda alguna de “la gente de la radio”, como ella dijo. “A ustedes yo les conozco la voz, ustedes son los de Sinaí”, dijo con gran alegría mientras la feliz María Irene asomaba tras una galera que alberga un poco de leña y una improvisada tijereta donde se hayan algunas gallinas…
Luego de los saludos de rigor, continuamos avanzando hacia el humilde hogar de nuestra feliz radioescucha, que no cabía de la emoción al saber que el mismo personal de la emisora estaba con ellas; así, mientras nuestro compañero Jordan Loaiza cargaba el surtido diario que íbamos a dejar, la señora Flor Chinchilla decía una y otra vez: “yo sólo escucho Sinaí, yo no escucho nada más, yo no veo tele…, yo sólo tengo a Sinaí y a Dios”, aseveró con gran decisión, mientras se tomaba con sus manos la cabeza y miraba a lo alto como agradeciendo al Todopoderoso.
Ya en la pequeña casita, fue difícil ingresar todos hasta su interior, el reducido espacio hablaba quizá de las muchas necesidades que pueden tener, pero desde ese lugar emanaba un audio inconfundible, era la 103.9 FM que llenaba de alegría a quienes ahí habitan; y ubicados en la parte trasera de la modesta casa, conversamos con aquellas dos mujeres, mientras describían cómo Radio Sinaí es su compañía y alegría, y cómo para ellas la radio es su fortaleza humana y espiritual…
Entre los recuerdos, Doña Flor Chinchilla precisó haber tenido 14 hijos; “y aunque siempre pobres nunca nos faltó Dios, como tampoco hoy me falta, pues con mis 33 kilos de peso y mis dolores, me siento feliz de saber que le tengo a Él… y agradezco que Radio Sinaí nos traiga ese mensaje tan lindo de alegría y de Evangelio”, indicó doña Flor, mientras se sostenía de una vieja lavadora que ya hace buen tiempo no sirve.
Finalmente, encontramos la generosidad en su máximo esplendor, porque realmente queda demostrado que el corazón de los sencillos es el que más rebosa y el más desprendido; aquellas mujeres nos hicieron pasar entre el jardín, para ofrecernos unas de las cosas que más poseen, las plantas… y con gran alegría fueron desprendiéndose con tanta voluntad de aquellas sus queridas plantas, para que también nuestras manos se vinieran llenas, pero ante todo nuestro espíritu de haber compartido con una gente que vive con Radio Sinaí.